EL SITRAMSS: ¿UN MAL PARTO?

A todo Ingeniero Civil, para lograr un buen diseño que sea verdaderamente una solución adecuada, le es inexorablemente necesario y exigido, delimitar adecuadamente el problema, entender la necesidad que se desea suplir, tener acceso a mucha información en forma de adecuados insumos a ser tomados en cuenta al momento de formular una solución o proyecto, contar con proyecciones a corto, medio y largo plazo de la demanda y uso de la obra, así como una mente abierta, bien educada e instruida académicamente, poniéndola en el cielo pero con los piés en la tierra.

De ahí el nombre del profesional en comento: Ingeniero, precisamente porque se le exige a éste, el uso extremo del ingenio para aportar nuevas e innovadoras ideas que brinden soluciones al problema que se le plantea a él.

Como un paréntesis en el camino...

En el año 1979, cuando servidor se encontraba estudiando Ingeniería Civil, ha tenido como excelente catedrático, al Ingeniero Aparicio Díaz Amaya, quien impartía la materia “Introducción a la Ingeniería”.

En el ciclo académico en que se ha cursado esta materia, se ha utilizado como libro de texto, el del autor Edward V. Krick, “Introducción a la Ingeniería y al Diseño en la Ingeniería”.

Este libro ha sido de muchísima ayuda en la vida profesional de servidor, y hasta la fecha forma parte de la biblioteca propia, sirviendo de consulta continua.

En este libro, Krick establece que, las soluciones posibles para todo problema, están limitadas por tres tipos de restricciones a saber:

a)     Restricciones resultantes debidas a limitantes reales: Acá se encuentran soluciones que realmente están fuera de los límites de toda factibilidad.

b)    Restricciones resultantes debidas al conocimiento del ingeniero: El acervo mental, de hecho, a partir del cual se obtienen las ideas abarca solamente una fracción del conocimiento. Mientras más preparado el ingeniero y mayor su experiencia, menos restricciones mentales para éste al momento de abordar un proyecto y proponer una solución.

c)     Restricciones resultantes debidas a restricciones ficticias: Injustificada o inadvertidamente se descartan soluciones valiosas. Por lo general, en la mayoría de los casos este es el tipo de restricciones más restrictivo,- vale la redundancia-.

Las últimas dos restricciones son las peores y más difíciles de sortear, debido precisamente al hecho de las limitaciones del conocimiento que se imponen al ingeniero por su preparación académica y experiencia práctica,- las segundas-, y por la falta de una mente abierta,- las terceras-.

Si se logra ampliar los límites derribando estas tres restricciones, o al menos, expandiendo el espacio de soluciones posibles, eliminando las restricciones ficticias, depurando las reales y mejorando los conocimientos, entonces se podrá dar una mejor solución al problema que se desea solventar.

Pero, como más adelante se habrá de ver, cuando los políticos intentan volverse ingenieros en forma impositiva, a éstos les sobreviene una cuarta limitante que podría ser llamada,- a juicio propio-, las “Restricciones resultantes de la ausencia de sentido común, por la avidez de réditos políticos y por la falta de transparencia”. ¿Se comprende?

Regresando al tema principal...

Así, por ejemplo, un adecuado diseño de una carretera, implica que, la misma no comience a funcionar a plena capacidad y transcurran los 20 o 25 años para los cuales ha sido diseñada, sin que se tenga la necesidad de modificarla o ampliarla antes de culminar el período de diseño.

Un buen diseño de una nueva obra, debe ser realizado con antelación, esto es, con proyecciones a futuro, sin embargo, por el mismo hecho de carecer de recursos económicos, los proyectos en los países pobres,- no se les llame equivocadamente ni lisonjeramente “países en vías de desarrollo”-, se ejecutan cuando ya es realmente impostergable su ejecución. Esto solamente desemboca en el hecho que, las obras comienzan a operar prácticamente a plena capacidad desde la puesta en funcionamiento de las mismas, en el mejor de los casos.

Por otra parte, en los países pobres, como lo que más abunda es la pobreza y la corrupción, entonces los recursos para ejecutar las obras son realmente limitados. Esta es precisamente una causal por la cual en estos países atrasados, las obras civiles no están correctamente construidas, mal ejecutadas, no cumplen con standards adecuados para su buen funcionamiento: Ej. Carriles más angostos de lo necesario; ángulos y pendientes de bombeo y peralte no correctos; cruces abruptos; pasos a desnivel muy estrechos; y, otros por el estilo.

Según algunos expertos, en los países pobres, un 40% a 60% de la ayuda internacional en concepto de créditos o donativos, se pierde por el alto grado de corrupción imperante en dichas naciones. ¡Recuérdese el caso de los “sacos” en los que un expresidente ha declarado que repartía la ayuda internacional en el Estado de El Salvador!

Un caso emblemático que los más de los residentes de este pequeño Estado, mayores de 45 años, deben recordar es el de la ampliación de la 7ª Calle Oriente – 7ª Calle Poniente en San Salvador, hace cerca de 35 años.

Cuando se amplió esa arteria de 3 carriles a 6 carriles, todo mundo pensó que el problema del tráfico vehicular en el centro de San Salvador quedaría resuelto casi en forma definitiva por muchísimos años. ¡Lamentablemente, a los 5 años, dicha arteria era ya insuficiente por el gigantesco tráfico!

Como nota curiosa, esta arteria cambiaría su nombre al de “Alameda Juan Pablo II”, con la visita al Estado de El Salvador, del Papa, el día 6 de Marzo de 1983, en plena Guerra Civil.

¡De “Alameda” solo el nombre, pues no hay ni un tan solo álamo sembrado a lo largo de dicha arteria vehicular!

Ahora, otro caso emblemático, pero éste con un final feliz:

Hace muchísimos años, la casi totalidad del tráfico aéreo internacional del Estado de El Salvador, fue tomado del Municipio de Ilopango, en el Area Metropolitana de San Salvador,- AMSS-, apenas a 10 kilómetros del centro del Municipio de San Salvador, hacia Comalapa, distante unos 42 kilómetros de éste, en el Municipio de San Luis Talpa.

Cuando en su momento se ha hecho el anuncio de la construcción de esta nueva obra y la nueva autopista de cuatro carriles que habría de unirla con San Salvador, muchísimos residentes del Estado alegaron que ello era una total locura, pues era muy lejos y además se invertiría demasiado dinero en ello.

Se dijo que, por qué no simplemente se ampliaba el Aeropuerto de Ilopango, lo cual sería mucho más barato con la gran ventaja de estar en el corazón del AMSS.

Dicho proyecto fué construido con un préstamo,- para variar-, y puesto en funcionamiento el 31 de Enero de 1980. ¡Según el periódico La Prensa Gráfica, la niña Ester Inés Noé ha sido entonces la primera pasajera que salió de la nueva terminal aérea!

Las ventajas han sido muchas: Mayor seguridad para los pasajeros y para la población en tierra; se ha creado un nuevo polo de desarrollo económico; se tiene en el AMSS una ciudad libre del ruido y contaminación aérea, etc.

La historia de la construcción de la nueva terminal comienza en 1972, con la planificación y el inicio de los trabajos de suelo. Uno de los principales promotores de ese proyecto, ha sido el entonces Presidente Arturo Armando Molina.

El 1º de Julio de 1972, el mandato del Coronel Molina inició con pié derecho, no porque asumiera el poder luego de unas tristemente amañadas elecciones,- como era lo acostumbrado en aquella época de los gobiernos militares en este pequeño Estado-, sino por la buena noticia que ese mismo día se le dió, referente al hecho que, el Jefe de la Misión Especial de Japón,- un sobrino del entonces Emperador Hirohito-, solicitaba una breve audiencia pues, traía un presente del gobierno japonés. El presente resultaría ser un cheque por US$1 millón para ser utilizado en el proyecto que requiriera mayor necesidad en este Estado. Eso sí, ¡dinero que ingresó al erario, y no ha sido repartido en sacos a unos “destinatarios”, como años después alegara haberlo hecho el expresidente de todos conocido!

El día dos de Julio de 1972, el Presidente Molina, su comité económico y sus principales asesores, resolvieron cuál sería el proyecto al que se destinaría dicho regalo japonés: UN NUEVO AEROPUERTO.

Así, pasaría a la historia el Aeropuerto de Ilopango, mismo que ya había quedado obsoleto, debido al rápido crecimiento de viviendas en el Municipio de Ilopango, al oriente del centro de San Salvador. ¡La verdad es que, la expansión de la población ponía en peligro tanto la vida de los que estaban en tierra como la de los pasajeros aéreos!

La única ventaja del Aeropuerto de Ilopango era su proximidad con el centro de San Salvador,- un poco menos de 10 kilómetros-.

Cuando dieron inicio las excavaciones de construcción, hubo una desmoralizadora sorpresa: El suelo, de origen volcánico, resultaba difícil de compactar, y construir sobre éste la torre de control no era seguro.

Además de los elementos y dificultades técnicas, los japoneses tuvieron que enfrentar una situación social sumamente tensa. ¡La Guerra Civil prácticamente había estallado desde 1975, aunque oficialmente se considera el detonante de la misma, el Golpe de Estado del 15 de Octubre de 1979, cuando se ha derrocado al Presidente General Carlos Humberto Romero,- mismo llegado al poder con los mismos artificios que lo ha hecho su antecesor el Coronel Arturo Armando Molina-!

El 17 de Mayo de 1978, las entonces nacientes fuerzas insurgentes salvadoreñas asesinaron al industrial japonés Fujio Matsumoto, presidente de Industrias Sintéticas de Centro América,- INSINCA-. Posteriormente secuestraron a Takakasu Suzuki, el director financiero de la misma empresa. ¡Sus connacionales fueron llamados a abandonar el país por parte del Gobierno Japonés!

Regresando al tema de la construcción del aeropuerto y del problema del suelo volcánico, los ingenieros especialistas japoneses dieron con la solución en 1979, tras realizar las pertinentes pruebas de suelo remojadas por la temporada de lluvias.

Sin embargo, a pesar que la representación diplomática en El Salvador estaba ya cerrada y el embajador japonés para El Salvador se había refugiado en Costa Rica, la labores de construcción en Comalapa nunca cesaron.

Hasta acá la síntesis de un proyecto exitoso: ¡Bien pensado, bien diseñado y bien ejecutado!

Otro ejemplo más cercano en el tiempo, aunque no con final feliz:

Hace no más de seis años, una de las promesas del entonces candidato a Alcalde por San Salvador, Señor Norman Quijano, fue la puesta en marcha de un “Metrobús” articulado.

Hasta se trajeron unas unidades del mismo sistema que la Municipalidad de Guatemala reciéntemente había importado para su transporte y que se prestó a su aliado político de San Salvador.

La respuesta del electorado fue de algarabía y, mucho de la victoria de Quijano sobre su oponente del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, se le atribuye a este “juguete” que el candidato de las derechas ofrecía a los capitalinos. ¡A todos gustó!

Para que gustara aún más, hasta se brindaron “vueltas”,- pasajes-, gratuitas para que así la población pudiera sentir y experimentar el gusto del nuevo transporte propuesto. Esto, muy al estilo de la costumbre en las ferias de los municipios del interior de El Salvador, en las que se acostumbra dar unas primeras “vueltas” gratuitas a modo de promoción en los juegos mecánicos que concurren a animar las fiestas patronales locales.

En realidad, Quijano no contaba con los fondos para dicho proyecto y el mismo nunca fue puesto en marcha por la falta de financiamiento.

Sin embargo, ¡por ofrecer nadie se queda pobre!

En Enero del 2014, cuando competía por la presidencia del Estado de El Salvador, Quijano “inauguró” en una forma apresurada, el “Metrobús”, como respuesta a lo que las derechas alegaron que era un “robo” y “plagio” por parte de las izquierdas del proyecto denominado Sistema Integrado de Transporte del Area Metropolitana de San Salvador,- SITRAMSS-. ¡En honor a la verdad, es éste un plagio de la idea original de Quijano! ¡Pero este tipo de ideas no gozan de protección legal ni derechos de autor!

Con todo, el “Metrobús Municipal” no ha sido más que un tan solo bus articulado. Y, para más INRI, lamentablemente, en el primer recorrido de este autobús, la máquina,- un autobús reciclado y donado por amigos españoles de Norman Quijano-, sufrió desperfectos mecánicos.

En las redes sociales se ha ironizado en aquellos días sobre este acontecimiento, alem que el mencionado proyecto iniciara con un tan solo autobús.

Luego, el entonces Viceministro de Obras Públicas,  Roberto Góchez, manifestó que la circulación de dicha unidad era ilegal, por no tener permiso de línea, ni cumplir con los requisitos para transportar personas. ¡La vieja costumbre de echar zancadilla al oponente político en vez de hacer las cosas mejor que él!

Bueno, abordando ahora el proyecto del SITRAMSS:

La polémica y quejas han estado a la orden del día a raíz de la construcción del SITRAMSS. A estas críticas, se suman las hechas por el Ingeniero Erick García, Master en Tráfico, Planeación y Transporte, graduado de la Universidad de Leeds, Inglaterra.

Dice el profesional que, el SITRAMS cuenta con errores técnicos que lo llevarán al “fracaso” y cuya ejecución tiene estrategias “fallidas”. En realidad, el caos vehicular es solo el inicio de un proyecto que ha tenido como base un “estudio mal hecho”, dice él.

En el 2011, el Gobierno a través del Viceministerio de Transporte,- VMT-, adjudicó al consorcio Escallón Morales,- EM&A-, un estudio de factibilidad para el SITRAMSS, que incluye cuatro tomos, 26 anexos con planos, mediciones y presupuestos, y una memoria. El costo de elaboración de este estudio fue de US$1,267,037.

Se ha obviado en el VMT muchas recomendaciones de estudios que soportaban realmente de manera técnica cuáles eran las mejores opciones para ejecutar este proyecto,- según García-.

“Hay dos grandes estudios. El de peso es el estudio de viabilidad y diseño preliminar del eje principal del transporte masivo, realizado por el Fondo Salvadoreño para Estudios de Preinversión,- FOSEP-, realizado por una de las mismas empresas que participó en el diseño final de este proyecto”, explica el mismo ingeniero.

También, en el 2010, un consorcio integrado por las empresas Epypsa,- de España-, C. Lotti & Associati,- de Italia-, y León Sol,- de El Salvador-, elaboró el estudio del Plan de Desarrollo Territorial para la Subregión Metropolitana de San Salvador.

El estudio contiene la propuesta de Rutas de Gran Capacidad para el futuro SITRAMSS; y tuvo un costo de cerca de US$1 millón.

Como antes ya se mencionara, en el 2009 el Alcalde Norman Quijano había comenzado a trabajar un proyecto de transporte para descongestionar el AMSS a mediano plazo: El famoso “Metrobús”.

Por su parte, el Gobierno Central no ha estado en la disposición de conceder y/o respaldar un crédito a la Municipalidad de San Salvador, y ha presentado aquél una propuesta propia, llamada SITRAMSS.

El actual tramo presentado por el Ejecutivo contempla una sola ruta que inicia en la terminal del SITRAMSS, ubicada en la Avenida Rosario Sur de Soyapango, y llegará hasta la 33ª Avenida Sur, por el hospital Médico Quirúrgico, en la Alameda Juan Pablo II.

Por el Boulevard del Ejército circulan cerca de 50 mil automotores diarios; mientras que por la Alameda Juan Pablo II lo hacen 41 mil, según las estadísticas del VMT.

Con la construcción del SITRAMSS, las arterias para el tráfico privado se redujeron en un 50%, o más en algunos puntos. ¡Verdad indiscutible!

La infraestructura del SITRAMSS ya está poniendo en apuros a los automovilistas, especialmente los que circulan por la Alameda Juan Pablo II, donde los carriles pasaron de tres a uno en ambos sentidos. ¡Otra verdad que no admite discusión!

Y, para colmo de males, ¡el Boulevard del Ejército pasó de tener tres carriles a dos en ambos sentidos!

Muy probablemente, si se hubiera quitado el arriate central, se hubiera dado más espacio. San Salvador tiene dos corredores naturales de movilización, por lo cual, si se toca cualquiera de ellos, se afecta la movilidad de oriente a poniente, y viceversa.

Y... hace poco, el Ministerio de Obras Públicas,- MOP-, canceló el contrato con la empresa mexicana que construía la terminal del SITRAMSS en Soyapango, cuya infraestructura quedó con un avance del 51%. Las autoridades aseguraron que contratarán a otra empresa para que finalice la obra.

El SITRAMSS también es un problema para los que quieren hacer retornos en el Boulevard del Ejército. Los pacientes del hospital Amatepec serán los más afectados, según García.

En la Alameda Juan Pablo II el problema es menor, dice García. Pese a que el retorno para accesar al hospital Médico Quirúrgico está cerca, el tráfico en la zona será el verdugo de los pacientes de este centro médico.

En Mayo del año recién pasado, el viceministro de Transporte, Nelson García, culpó de “muy deficiente” el estudio del SITRAMSS elaborado por el consorcio EM&A, y lo señaló como el culpable de los atrasos que ha tenido el proyecto.

Inicialmente el SITRAMSS estaba programado para iniciar operaciones en Febrero del 2014; pero la fecha se ha ido posponiendo y aún no hay un plazo firme para que arranque el proyecto, aunque el Vicepresidente Oscar Ortiz, prometió que todo el SITRAMSS estaría listo para Diciembre del 2014, lo cual sería un “regalo de Navidad” para la población. ¡Y transcurrió el 6 de Enero y tampoco los Reyes Magos dejaron operando y en funcionamiento el SITRAMSS!

El Estado adquirió un préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo,- BID-, de US$45 millones para la infraestructura del SITRAMSS.

Ojalá y todos los que critican el SITRAMSS, incluido servidor, estén equivocados y a la postre, el proyecto funcione tan bien como lo hace el Aeropuerto Monseñor Oscar Arnulfo Romero.  ¡Por lo abigarrante del proyecto, un feliz término no es avisorado!

Sin embargo, no hay que ser Ingeniero Civil ni experto en algo para entender que, si a una vía de seis carriles se le restan dos carriles, la fluidez vehicular sufrirá en forma negativa.

Emulando a lo que Quijano ha hecho hace seis años, ahora el SITRAMSS está operando en forma gratuita,- por al menos un mes-, antes de las elecciones de gobiernos locales, diputados nacionales y diputados del Parlamento Centroamericano.

Parece ser que, a fín de cuentas, el Alcalde Will Salgado, de la oriental ciudad de San Miguel, ha sabido imponer y marcar su paso y estilo, ofreciendo pan y circo a sus residentes, muy a su estilo: “De choto” (“De gratis”, en español salvadoreño)

Finalmente...

Para poner la cereza en el pastel, aparece un candidato a alcalde de San Salvador, proponiendo el “Tren Elevado de San Salvador”,- TESS-.

Se trae este último comentario a colación, no en tono de mofa, mas bien en tono de preocupación porque en verdad que, el autor Niccoló es muy acertado cuando dice que, los gobernantes siempre buscan seguir el humor de los gobernados. ¡Las masas siempre encontrarán quien las tenga encantadas con pan y circo y con promesas imposibles de cumplir pero que endulzan los oídos!

El TESS no se detendría en intersecciones y no dividiría la ciudad. Quien lo propone alega que, dicho proyecto podría ser ejecutado con un costo de entre US$11 millones y US$20 millones por kilómetro, en su ruta desde Soyapango hasta la ciudad de Santa Tecla.

¡Aún no se ha cancelado el préstamo con el que se está ejecutando el SITRAMSS, cuando ya se viene con otra idea para que el endeudamiento crezca!

El proyecto tendría 12 estaciones y su inversión total podría rondar los US$225 millones, y el costo por pasaje podría rondar los US$0.20 sin necesidad de subsidio. ¡¿Y el financiamiento para los fondos?!

El TESS permitiría movilizar unas 2,000 personas por viaje, ya que cada tren estará conformado por cuatro vagones con capacidad cada uno para transportar a 500 personas.

El candidato que ha propuesto este proyecto, en una forma dadivosa, benévola y magnánima dice que, la idea del proyecto la pone a disposición de cualesquiera candidato que gane la Municipalidad. ¡Gran innovación la de obsequiar una idea!

Entre los ingenieros y arquitectos hay un adagio muy sabio: “El papel aguanta con todo.”

¡Saque el lector sus propias conclusiones!

MIE 04 FEB 15