Del 15 al 19 de
Abril de 1961, un grupo armado de cubanos respaldado por Estados Unidos de
América,- EE. UU.-, ha incursionado en Bahía de Cochinos, Cuba. El fracaso fué
rotundo, lo cual llevó a Fidel Alejandro Castro Ruz, líder de la Revolución
Cubana, a sentirse invencible pero… sempiternamente amenazado, dándose perfecta
cuenta que la espada de Damocles seguiría pendiendo sobre la isla y sobre su
cabeza. Así, se acercó aún más a la Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas,- URSS-. Luego, sin mucho esfuerzo, el líder soviético Nikita Serguéyevich
Krushchev, lo convenció para permitir instalar misiles nucleares en la isla,
por supuesto en forma secreta. Después se vino la Crisis de los Misiles o
Crisis de Octubre de 1962, cuando las dos potencias nucleares estuvieron al
borde de la guerra.
Los cubanos y
soviéticos estaban en extremo molestos porque EE. UU. había descubierto los
planes, gracias a los vuelos que violaban el espacio aéreo cubano de los
aviones espías U-2 estadounidenses sobre la isla.
Durante la crisis,
el Sábado 27 de Octubre de 1962, el mayor estadounidense Rudolph Anderson, de
treinta y cinco años de edad, a las 09:09 horas,
se instaló en la estrecha cabina de su U-2 para una nueva misión sobre Cuba que
precipitaría aún más, horas más tarde, a EE. UU. y a la URSS al borde de un
apocalipsis nuclear. Desde que el presidente John Fitzgerald Kennedy había
desenmascarado públicamente a los soviéticos unos días antes, la tensión no
había dejado de aumentar.
El
mayor Anderson se encontraba en su quinta misión, la vigésimo cuarta de un U-2
desde que otro avión espía descubriera por primera vez los misiles balísticos
trece días antes.
Despegó
de la base de Orlando en la Florida y alcanzó una altitud de veintidós mil metros
con la misión de fotografiar el despliegue cubano y soviético en el este de la
isla, en las cercanías de la base estadounidense de Guantánamo. También debía “sondear”
las defensas aéreas soviéticas, que comprendían los lugares de lanzamiento de
misiles tierra-aire V-75, que ya habían abatido el U-2 de Francis Gary Powers
en la URSS en 1960.
Al
general soviético Stepan Grechko, responsable de la defensa aérea en Cuba, le
preocupaba la posibilidad que el U-2 tomara fotografías de las locaciones
secretas de los misiles nucleares tácticos cercanos a la base de Guantánamo. “Nuestro
invitado está sobre nosotros desde hace más de una hora (...) está descubriendo
nuestras posiciones en profundidad”, dijo Grechko a su superior. A las 11:16
horas, el general dió la orden: “Destruyan el objetivo 33.”
Tres
minutos más tarde, el avión espía fué derribado en el norte de la isla. Una
parte del fuselaje, en la que se encontraba el cuerpo de Anderson, fue hallada
en un campo de caña de azúcar.
En
Washington, los militares clamaban y presionaban a Kennedy por invadir la isla.
El pesimismo y la tensión iban en aumento cuando Nikita realizó una nueva propuesta:
el retiro de los misiles de Cuba a cambio del retiro de los cohetes
estadounidenses instalados en Turquía.
Kennedy
se encontraba en plena reunión con su comité y consejeros analizando la
respuesta, cuando a las 14:03 horas se le informó que el U-2 de Anderson no
había regresado. Apenas veinte minutos antes, había recibido el anuncio que
otro U-2 en misión en el Polo Norte se había extraviado sobre territorios
siberianos y que, por poco, no había sido abatido por los MIG-21 soviéticos
lanzados para perseguirle. Los militares estadounidenses pedían
que se autorizara la invasión de la isla y la destrucción de las defensas aéreas cubanas.
En
Moscú ya era de noche cuando Nikita fué informado sobre el derribo del U-2 en
Cuba. ¿Sería capaz Kennedy de “tragar la humillación” de la pérdida de este avión?
¡Anderson resultó el único estadounidense muerto en la crisis!
Castro
había pedido a Nikita que lanzara los primeros misiles, a lo cual éste le
respondió,- palabras más, palabras menos-, que no fuera tan estúpido ni idiota,
que en caso de ir a la guerra no habría ganador alguno. Algunos días después,
Castro se refirió a Nikita en palabras profanas. Estas asperezas fueron limadas
cuando se invitó a Castro a la URSS unos meses después. Indudablemente, Castro
había llegado a creer que tenía poder de decisión en toda la situación, no
percatándose que era él un mero peón utilizado por la URSS.
Afortunadamente,
la URSS aceptó la humillación pública de la retirada y por su parte los
estadounidenses aceptaron la “humillación” en secreto del derribo del U-2 y de
la muerte de Anderson y así se evitó millones de muertes y la pérdida de la
civilización como ahora se le conoce. ¡Unos meses después, EE. UU. retiró sus
misiles de Turquía!
Ahora, en forma sucinta, ¿qué está sucediendo en
Ucrania hoy en día?
Desde hace varios días Rusia se ha retirado de
Jersón en una forma “humillante” ante el avance ucraniano. Sin embargo, el pasado
día Martes quince del presente mes, un misil cuya procedencia se dijo
inicialmente que era rusa, ha impactado en Polonia causando la muerte de dos personas.
Algunos miembros del gobierno polaco, así como Ucrania han alzado inicialmente
la voz, indicando que el responsable era Rusia, con lo cual, al constituir ello
un ataque contra un país miembro de la Organización del Tratado del Atlántico
Norte,- OTAN-, todos los demás países miembros están en la obligación de
responder de consuno militarmente contra el agresor.
Sin embargo, al día siguiente, el presidente de
Polonia, Andrzej Duda, ha asegurado que no hay pruebas que el misil caído en
territorio polaco fuera ruso y que no cree haya sido intencional, algo así
como, “en caso de duda, abstente”. Por su parte, el presidente de EE. UU.,
Joseph Biden, ha dado una versión similar.
Es “muy probable” que
la explosión fuera causada por la defensa aérea ucraniana, dijo Duda en una
conferencia de prensa al día siguiente y, calificó el hecho como un “accidente
desafortunado”. Ucrania estaba tratando de defenderse de los extensos
lanzamientos de misiles rusos sobre su territorio y un misil ucraniano es el
que ha caído en Polonia. Ambos bandos en la guerra han utilizado municiones de
fabricación rusa y así las autoridades polacas piden ahora cautela.
Rusia ha negado
cualquier responsabilidad desde el inicio del asunto y ha acusado a los estados
occidentales de una reacción histérica. El portavoz ruso Dmitry Peskov dijo que
Varsovia debería haber dejado en claro de inmediato que los restos procedían de
las defensas aéreas S-300 de Ucrania.
Pero, el realmente intransigente
es el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, quien insiste en que se trata
de un misil ruso y exige a la OTAN una acción militar inmediata en contra de
Rusia. ¡Él cree que su opinión cuenta!
Es un secreto a voces
que, EE. UU. y Rusia están negociando una solución a la guerra en Ucrania. Sin
embargo, para no lastimar el ego de Zelensky, todos los involucrados del lado
de la OTAN aseguran que, las negociaciones “dependen” de Ucrania y solo de
ella.
El presidente
estadounidense, Joseph Biden, dijo a un grupo de reporteros en Indonesia, donde
participaba en la cumbre del G20, que era “improbable” que la trayectoria de
los misiles rusos hubiera impactado territorio polaco, pero concluyó diciendo: “Veremos.”
Se ha sabido también
que, Zelensky llamó repetidamente, vía telefónica al presidente de EE. UU.; sin
embargo, éste se ha estado negado a recibir la llamada. ¡El mensaje es claro!
El Secretario General
de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que “las guerras son peligrosas y se cometen
errores”. La verdad es que, sorprende la repentina comprensión de todos líderes
occidentales ante esta situación. “Lo más probable es que se trate de un misil
de la defensa antiaérea ucraniana”, dijo Stoltenberg aunque señaló que la
responsabilidad final recae en Rusia por haber invadido a Ucrania que, sostuvo,
tiene derecho a defenderse.
La misma hipótesis fue
planteada por el Secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, quien afirmó
que Washington sigue investigando, “pero no hemos visto nada que contradiga” la
sugerencia de la OTAN y de Polonia de que probablemente fué un misil de defensa
aérea ucraniano el que cayó.
El Ministerio de
Defensa ruso, por su parte, dijo que los reportes que responsabilizaban a Rusia
del impacto de sus misiles en territorio polaco eran una “provocación
deliberada”.
Parece ser que el ego
de Zelensky ha sido muy herido en esta situación y se le está ordenando y
presionando a negociar la paz. ¡La historia es siempre repetitiva!
¿Algún parecido y/o
similitud entre Zelensky y Castro?
¡Saque el lector sus
propias conclusiones!
José Roberto Campos
hijo
DOM 20 NOV 22